sábado, 23 de mayo de 2009

VISIONES

El suelo era húmedo y pegajoso, los gritos y las bombas eran sus despertadores Sus destartaladas botas torturaban sus pies y el frío acuchillaba su campera

Durante años se preguntó ¿por que estaba allí? ¿Que había hecho para estar en ese lugar?
Miles de preguntas acribillaron su cabeza durante años hasta que de a poco, una sola quedó resonando en su cabeza - ¿Qué es lo último que veré?
Entre cuerpos vivos y muertos se mecía su vida, todo era color gris, las nubes, el humo y el cielo. Ya no tenía nombre, ni siquiera amigos, era un fantasma vivo que deambulaba por los campos de batallas buscando gente o restos de ella.
Atrás quedaron para el los días de vinos y manjares, muy atrás quedo el amor de su bella familia, ya nada de eso existía para él. Por las noches pensaba si esa vida que anhelaba realmente había existido o solo era parte de su imaginación.
Todos los días tomaba su arma y repetía la misma rutina, disparar y esconderse, ver quien había resultado herido, tomar unas gasas y mentir acerca de lo bien que estaría el ahuecado después de la curación.
Su vida se iba con cada suspiro, el tiempo se agotaba, en cualquier momento podría ser el próximo, los enemigos estaban cerca y eran más en números. Solo era una cuestión de horas, el tan fatídico final.
Considerando su situación, tomó una última decisión, la cual consistía en ser libre. Libre para pensar, imaginar, caminar. Se despojo de sus ropas militares y de sus armas y comenzó a caminar rumbo a la trinchera enemiga, como primera media optó por cambiar el clima frío y nublado por algo soleado y primaveresco. Al observar los gratificantes resultados coloreo el pasto húmedo de un color verde chillón, muy luminoso, tanto, que sus ojos se cerraron instantáneamente por el destello. Todo era perfecto. Su siguiente medida fue la de modificar la estructura del lugar, ya no había edificios en ruinas sino un gran prado con muchos juegos, mesas y hamacas, los pájaros surcaban los cielos, volaban en circulo con el único objetivo de abrazar las nubes para poder descansar en ellas.
Tras cada paso una nueva bala enemiga cortaba su cuerpo pero no su alma, ya nada era igual, todo había cambiado, el mundo de la esperanza, la luz y la alegría era a prueba de fuego, era indestructible.
Acostado sobre el lúgubre suelo, tuvo su última visión, vio en el cielo un gran avión y posteriormente extendió sus brazos y lo tomó, cerró los ojos y comenzó a escuchar la risa de su hijo. Lo último que el soldado vio en su vida fue a su hijo volar lejos, en el cielo.



federico (24/05/09)

domingo, 10 de mayo de 2009

Escorpionazo

Extraña y hermosa sensación
el veneno entra por mis venas
ellas se sienten acaloradas, excitadas
todo mi dolor se ahoga en el fulgor
de la aguja
Mis recuerdos se queman, nuevas
imágenes aparecen, un paraíso
perdido, tal vez un momento histórico
demasiadas sensaciones atraviesan
mi cerebro, creo que es mucho por
comprender, así que solo me
relajare.

A pasado el tiempo, mi esqueleto
imita el cuerpo de un hombre
famélico, ya no tengo resistencia
ya no hay éxtasis, la música ha dejado
de sonar, no mas melodías de
paraíso, solo fuego y adicción.

¡Aquí están! han llegado mis ultimas
alucinaciones, ha vuelto la música
un rock violento me lleva a través de
de un tunél a toda velocidad, nada me detiene
aquí viene el ultimo “escorpionazo”
la sangre brota por mis canales violetas
hoy es el fin, hoy digo adiós

Esplendido funeral, están todos
mis seres queridos, mi familia, mis amigos
y mi deeler.



Federico (11/05/09)

jueves, 7 de mayo de 2009

Meliae

Que lindo es recordar nuestro campo de batalla
lleno de estrellas y planetas.
¿te acuerdas Meliae?
Jugabamos día y noche con esas flores prohibidas
que tu abuela guardaba con tanto recelo
¿lo recuerdas?
El olor del pasto mojado, las cajas de madera que
encontrábamos en la calle y que con un poco de
astucia convertíamos en castillos medievales, no se
si recuerdas todo aquello, la verdad no lo se.

Ahora te veo tirada en la cama, si saber quien eres y
me miro a mi, patético, débil, sólo
¿Por qué nos debíamos encontrar en esta situación, tu sin
conciencia de la realidad y yo tan demacrado por la misma
razón que te demora?

¿Quien cambio nuestras valientes historias por estas bastardas
memorias del subsuelo?
Te veo tan frágil en la cama, el tiempo pasa y solo tengo
Una hora para salvarte, tan solo una hora, por que después otro pagará
Y querrá tempestad y furia
yo solo quiero que descanses Meliae
quiero castillos, rosas y no luces rojas y un detestable olor
a aerosol de ambiente.

Obra: Lucille VanEyck

                      Federico (07/05/09)

martes, 5 de mayo de 2009

Tan sólo deseo unos hermosos ojos
para poder conversar en silencio
y un hombro donde descansar
por siempre en un sueño eterno







Federico (05/05/09)

domingo, 3 de mayo de 2009

Spieluhr

Un pequeno hombre pretende morir
quería estar solo
el corazón pequeno estuvo quieto durante horas
asi que decidieron que habia muerto
es enterrado en arena mojada
con una caja de música en la mano

La primera nieve cubre la tumba
ha despertado con dulzura a la criatura
una noche fria de invierno
despertó el pequeno corazón

Al cubrir el hielo al nino
se pone en marcha la caja de música
una melodía en el viento
y bajo tierra canta el nino
Arriba y abajo jinete
y ningún ángel bajara

mi corazón ya no latira mas
sólo la lluvia llora en la tumba
Arriba y abajo jinete
una melodía en el viento
mi corazón ya no latira mas
y bajo tierra canta el nino

La luna fría en todo su esplendor
escucha los gritos en la noche
y ningún ángel bajara
sólo la lluvia llora en la tumba
Entre firmes maderos de roble
tocará con su caja de música
una melodía en el viento
y bajo tierra canta el nino
Arriba y abajo jinete
y ningún ángel bajara

mi corazón ya no latira mas
sólo la lluvia llora en la tumba
Arriba y abajo jinete
una melodía en el viento
mi corazón ya no latira mas
y bajo tierra canta el nino

El día de los difuntos escucharon
una melodía desde campo santo
allí la desenterraron
salvaron el pequeno corazón del nino
Arriba y abajo jinete
una melodía en el viento
mi corazón ya no latira mas
y bajo tierra canta el nino
Arriba y abajo jinete
y ningún ángel bajara
mi corazón ya no latira mas
sólo la lluvia llora en la tumba


Rammstein - Mutter

Entrevista a un suicida

-¿Qué pasa Caleb?
- no puedo contártelo
-¿por que?
- por que si lo haría, te convertiría en el heredero de una maldición
- ¿A que te referís con eso?
- digo que sobre tu espalda cargarías una responsabilidad indeseada y a partir de todo lo que te enteres de ahora en mas, no habrá vuelta atrás, todo se terminara para mal o bien.
- te escucho
- vos sos el que elige… Cuando una persona intenta suicidarse, la cura esta lejos de ser una realidad, se transforma en una enfermedad que te persigue por todos lados, aumenta su densidad con el paso del tiempo, por algunos momentos para, pero no desaparece.
La pulsión es una constante y con los distintos traspiés de la vida madura, la idea se te aferra a tu cerebro y esa puta idea egoísta choca con todo lo bueno y noble que tenes adentro tuyo, destroza los sueños y los ideales, destruye las relaciones sociales, te hace individuo, te convertís en un lobo estepario. No hay sol nunca por que todas las mañanas preferís olvidarlo y sumergirte en una magna negritud llena de sombras.
Todos los que te quieren te preguntan que te pasa y vos con un gran mentiroso les decís “nada, estoy bien” o cuando no lo podes simular decís que te duele la cabeza o tenes sueño. En realidad, cuando lo pensas tiene su lado bueno por que lo haces para protegerlos, para no lastimarlos y no darles problemas por que los amas y lo ultimo que queres es verlos tristes por que sos conciente de que aunque no valores tu vida, ellos hacen mucho por vos día a día.
Cuando sabes que no hay otro camino empezas a buscar soluciones menos indoloras, algo que no agrave la situación aún mas por que para nadie es agradable encontrar un cuerpo sin vida, sumado a que esta sociedad no prepara a la gente para la muerte sino todo lo contrario, disfruta el morbo de que esta aparezca de sorpresa para poder ver al humano en lo mas bajo y compararlo con uno mismo y decir “eh soy un tipo con suerte, pobre este o pobre el otro”.
-¿Qué solución encontraste?
Hasta el momento, la de desaparecer para siempre sin dejar rastro, romper los documentos, viajar sin nada hasta encontrar un lugar adecuado, digno de ser lo ultimo que vas a ver en vida. Es lo más noble por que al irte sin dejar rastro, das en algunos casos la posibilidad de que la gente crea de qué andas por allí viviendo como trotamundo.
-¿Pero al contrario, generarías una esperanza en las personas que te quieren y estas te buscarían desesperados, nunca renunciarían a la esperanza de verte con vida pero ponte a pensar que estas personas vivirían tristes por ahí, buscándote?
Es un buen razonamiento, pero una buena carta soluciona ese problema, una carta de falsa esperanza
Mi estimado amigo, ningún profesional me puede curar, por que ellos solo quieren el dinero, y por si una de esas casualidades del mundo aparece un profeta que me cura. Esto me quitaría mi superARTE natural, eso con lo que todos nacemos, sin la muerte y sin las concepciones de amor que esta me da no podría hacer lo único que me permite colaborar con la especie humana que es escribir. En este mundo profesionalizado desgraciadamente lo único que le daría valor a estas palabras seria mi deceso, les daría la jerarquía. El famoso “se cumplió” lo que decía.
Cuando sos conciente de lo que vivís sabes que cada nueva relación es una daga que te corta el cuerpo, por que sabes tarde o temprano que te vas a mandar una cagada muy grande y vas a lastimar a muchísima gente.
Te alejas del amor, de conocer una chica, te da mucho miedo hacerlo por que sabes que esas relaciones con el tiempo atan emocionalmente a las parejas y la extinción de alguna de las partes desequilibraría a la otra.
Existen muchos suicidas, algunos lo hacen rápido, otros tardan y otros simplemente lo usan como energía para vivir, se ponen un tope de años y hasta estos viven plenamente, pero esos generalmente son falsos suicidas que si las cosas salen bien en su vida, se terminan arrepintiendo.
-¿Tuviste mucho tiempo para pensar esta respuesta no?
Si muchos años, en la cama, mirando el techo, cuestionándome todo y teorizando a cada momento, llorando por otros. Pensé que lo dominaría pero al final esta te termina dominado a vos.
¿Pensas lo que vas hacer, pensas en la gente?
Todo el tiempo, por eso no me anime todavía a hacerlo, por que hay que esperar y encontrar el momento de ruptura perfecto para pasar desapercibido.
-Ya no tengo mas ganas de seguir con esta entrevista así que redondeemos, ¿te parece?
Lo único que me queda por decir, es que esta entrevista que te di tiene tiene como único fin el de colaborar con la humanidad, para que esta se conozca un poco mas, lo que digo es que a partir de esto no se puede generalizar, cada caso merece una particular atención, pero lo que si es algo general es la idea de que vivimos en un mundo de plástico y enfermo, muy enfermo.
Ya con el tiempo ves el suicidio como algo digno para dejar la tierra por que es algo que vos independientemente terminas eligiendo.

Federico (03/05/09)

Cuentos de Amor: Los Obreros



La nieve quemaba las espaldas de los mineros que caminaban rumbo a su “post- tumba”, los alientos y la desesperanza se mezclaban junto a los copos de nieve que
Descendían del olvidado cielo.
Paso tras paso, las herramientas de trabajo aumentaban su peso cambiando gramos por kilos y el aire forzaba a trabajar aun más a los suplicantes pulmones. Día a día los obreros descendían por la oscura cueva preguntadose cuando esta se abriría al cielo para por fin después de tanto dolor poder descansar. No había amaneceres amarillos ni atardeceres rojos para ellos, solo luz blanca y negra al final del día.

Aún los recuerdo, todavía puedo recordarlos, tengo esa bendita suerte, eso que llaman memoria visual aunque estoy casi seguro que es mi corazón el que me permite recordarlos, a todos y a cada uno por separado. Es el amor a sus ideas lo que hoy me inspira a escribir estas líneas ensangrentadas y empapadas de dolor.
Es difícil determinar el día de los acontecimientos así que solo me limitare a relatar los hechos ya que para nosotros los proletarios, los días son todos iguales.
Cada mañana al sonar la campana del pueblo una hilera de hombres toscos y tristes caminaban rumbo a su fuente de trabajo, tomaban sus herramientas y luego proseguían su caminata rumbo a la condenada mina.
Entre estos hombres, niños y mujeres se encontraba mi único gran amor, su nombre era Olaf y el era mi padre, mi madre, mi hermano, mi amigo, mi única esperanza y razón para no ver al mundo como un gran infierno sin solución. Todas las noches al finalizar el horario laboral, lo esperaba en la puerta de la mina para saludarlo y darle las gracias todo lo que hacia por mi. Su paso lento y cansino al salir de la mina siempre me llamo poderosamente la atención por que mientras el resto corría despavorido para poder llegar lo más pronto a su casa, él jamás apuraba su paso, siempre zancadas largas y con pronunciadas pausas. Su cara apagada, sonreía al verme cambiando drásticamente, era tal el cambio que todos los que allí estaban, solían sorprenderse.
¿Has comido algo?, esa era su pregunta al salir de la mina y ante mi negación, solía tomarme de la mano y llevarme a su casa.
Generalmente compartíamos un poco de pan duro y una sopa de agua caliente con gusto a algún vegetal, al terminar la comida tomaba un libro de su estantería y me enseñaba a leer. ¡Era tan buen maestro!, jamás se enojaba y su paciencia era una total virtud. Todos los días me miraba a los ojos y me decía “sabes Ian, la vida no es tan mala, a lo que me refiero es que, si en verdad hay mucha maldad y muchas cosas feas pero siempre pienso en que si nosotros, los que la pasamos mal nos unimos, nos educamos y luchamos podremos salir adelante y por fin vivir en una primavera eterna.”
Tan dulce sonaba su voz, tan tranquila pero a la vez firme y fuerte. Esto me hacia creerle hasta la devoción.

La campana volvía a sonar y era otro día en la oscura mina, todo indicaba que seria otra jornada laboral, pero los acontecimientos que ocurrieron acabaron con esa idea loca mia.
Tomé mi pico y comencé con mi tarea diaria, luego de un tiempo note que se respiraba un aire extraño en la mina, las voces de protesta y cansancio comenzaron a sonar como música.
Acostumbrado a esta nueva música seguí con mi pico taladrando la pared, para poder sacar esas piedras que tan bien le hacen a la industria y tan mal a mi salud, cuando de pronto, los gritos tomaron el lugar principal. Una mala explosión en el fondo de la mina hizo que esta comenzara a temblar y a derrumbarse. Asustado por la suerte de Olaf corrí contra marea rumbo a su posición pero para mi desgracia no lo encontré allí, solo había cadáveres de extraños. Al ver esto me dirigí rumbo a la salida apresuradamente, la luz del día se hacia mas visible a cada paso recorrido. Allí en la puerta pude ver a varios compañeros, entre ellos a Olaf.
¿Quién diría que esa seria la ultima vez que mi héroe me viera con vida?, nadie seguro pensaría eso pero la realidad es que la muerte quería besarme y yo no pude negarme.
A metros de la puerta mi cuerpo cedió al derrumbe de un grupo de rocas que se desplomaron sobre toda mi integridad física, rompiendo todos mis huesos.
Los gritos de desesperación rompieron toda la escena, eran tantos y tan diversos que formaban una sola masa. Pasaron horas hasta que encontraron mi cuerpo y por desgracia, mi amor era el que lo había encontrado. Al ver mi pútrida imagen, Olaf me tomo entre sus brazos y me apretó junto a su pecho, jamás lo había visto así. Sus lágrimas eran imitaciones del rio Rhin y sus gritos desgarraban el cielo haciendo que dios se escondiera detrás de sus lacayos alados.
Una y otra vez repetía ¡Ian por favor, Ian por favor, respira! A medida que el tiempo transcurría su voz menguaba por el dolor y por las lágrimas que ahogaban sus ojos.
Finalmente se resigno y dejo de hablar, esa fue la última vez que él hablo.

Sin autorización y con total osadía, armó una procesión para poder velar mi cuerpo, en su casa cumplió con los rituales funerarios y adorno mi cuerpo con unas marchitas flores, un traje negro y un montón de cartas que nunca pude leer ni saber de que trataban
Junto a otros hombres que lo ayudaron, cargo con mi cuerpo hasta la colina que se encontraba al lado de la mina, desafiando a la decena de policías armados que se encontraban custodiándola.
El maldito dueño al ver esto, crispo en un ataque de nervios y despotismos siguiendo la procesión con insultos y amenazas de despido. “ustedes son como la mala hierba, crecen en todos lados” repetía una y otra vez.
Ya en la colina, Olaf lloró mi cuerpo mientras me enterraban, su dolor generaba un micro ambiente donde la nieve no se animaba a entrar y el viento como buen cobarde ante la tristeza, optó por un atajo lejos de todo esto.
Tras varios minutos su jefe, lo tomó de la espalda y susurro a su oreja “estas triste por la muerte del infante, pues deja la mina entonces por que no será el primero ni el ultimo”.
Al oír estas palabras Olaf tomó un martillo que estaba ahí y una carta que él me había escrito que estaba colocada en un bolsillo cerca de mi corazón y posteriormente tomó distancia de su jefe y en cuestión de segundos lo agarró del cuello en un rápido movimiento. Lo miró fijo a los ojos y sin hacer caso a las amenazas policiales que instaban a soltar al apresado, hundió su martillo sobre todo el cráneo del demonio, haciendo salpicar la sangre para todos lados.
Mirando al cielo dejo caer el cuerpo muerto y el martillo pero no la carta. La policía al ver esto abrió fuego inmediatamente, destrozando el cuerpo de mi padre en una cuestión de segundos. Todos los obreros allí presentes observaron atónitos este salvajismo y tomaron cartas en el asunto, en misión kamikaze corrieron hacia los policías con una furia que el mismo lucifer nunca podría imitar.
Desgraciadamente todo fue en vano porque a pesar de que llegaron hasta la ubicación de los cerdos , estos dispararon, aniquilándolos a cada uno y a sus sueños.
El cabello de Olaf, seguía al viento y en su mano la carta se abrió, brindándose al mundo
“Ian, mi hermano, por mis errores hoy has pagado, si me hubiera rebelado a tiempo, otra seria tu suerte hoy, todo es mi culpa. Perdóname.
Ya no como y tampoco hablo, nada tiene valor ni sentido para mi, no puedo protegerte ni ayudarte, así que mi ilusión de que puedas leerlo en algún lugar del universo, me lleva a escribirte estas líneas
"Por favor cuando algún humano intente acabar con tus sueños toma sus miedos y ponlos en su contra, enseñándole que ningún humano ha nacido para obedecer ni mandar, sino para ayudarnos el uno al otro en los problemas diarios. Nunca dejes que te pongan una capa sobre tus alas, vuela lo mas alto que puedas, vuela hasta que el sol se asuste y se aparte de tus pasos mostrándote que tan grande es el universo”.


federico (03/05/09)