A una bailarina de danza...
En la arena ha comenzado el baile galáctico,
los planetas se agasajan tras observar
los movimientos de las entrellas
pretegidas finamente por la luz blanca de
la luna madre.
Una dulce joven de carne y hueso se hace
presente en este festín universal y tras
muchos forsejeos con las estrellas, toma el lugar
principal en la pista de arena.
No existen ojos capaces de explicar semejante
fenomeno, ni mil dioses podrian haber creado
cosa semejante, sus movimientos eran extenciones
perfectas sobre la naturaleza; arena, arbol, cielo.
Sus pasos creaban y destruian todo a su alrededor,
cumplia con el ciclo de la vida.
Es nueva estrella, de luz propia, que
ha transformado una noche de manajares y deleites cosmicos
en un momento ad adsurdum en el tiempo y espacio,
inubilando a todos los presentes y escribiendo constantes historias
en el aire sobre la vida y la muerte.
finalmente, la luz del amanecer llegó y el mar beso sus pies, el horizonte
acaricio sus mejillas y el sol le hizo cosquillas.
fede 16/01/09
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